diciembre 17, 2012

Los Nefilim o Nephilim


Los Nefilim o Nephilim (“derribadores”) son, en la Biblia y otros escritos religiosos judíos y cristianos tempranos, un pueblo de gigantes o titanes que se mencionan en el Génesis 6:4 y en el Libro de los Números 13:33. Los Nefilim son hijos de los “hijos de Dios” y las “hijas del hombre“. Según la traducción, el término nefilim se ha traducido variadamente por “gigantes”, “titanes” o aún se ha dejado en el original hebreo. Para los arameos, el término Nephila se refirió específicamente a la misteriosa constelación de Orión, y así los Nefilim serían descendientes medio divinos de esta constelación. Según la Biblia, los Nefilim aparecen como el deseo contranatural de algunos ángeles inicuos de tener relaciones sexuales con las mujeres de la tierra. Y aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas, al ver los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Entonces dijo Yahvé: «No contenderá para siempre mi espíritu en el hombre, porque ciertamente él es carne; pero vivirá ciento veinte años». Los nefilim se hallaban en la Tierra en aquellos días, y también después, cuando los hijos del Dios [supuestamente verdadero] continuaron teniendo relaciones con las hijas de los hombres y ellas les dieron a luz hijos, estos fueron los poderosos que eran de la antigüedad, los hombres de fama.
Igualmente los gigantes son nombrados en otros textos considerados apócrifos, tales como elLibro de Enoc: (de la biblia etíope); presenta una descripción más detallada sobre los gigantes bíblicos. El diluvio universal, y como consecuencia la destrucción de toda la humanidad fue provocada por estos seres, que no habrían sido creados según los planes de Dios, y  no tienen capacidad espiritual y por tanto no tienen resurrección. Similarmente se trata según otras versiones, de la descendencia de los ángeles caídos y las hijas de Caín, de donde surgió esta raza con el fin de sabotear los planes de Dios, cruzándose y contaminando la descendencia de Adán. (Ne-phil’-im, significa derribadores). La palabra Refaim se interpreta también como fallecido o muerto. También se habla de ellos en el  Libro de los Jubileos (la biblia etíope), y complementa la historia presentada en el Libro de Enoc. En Baruc leemos: “Allí nacieron los famosos gigantes de los primeros tiempos, de gran estatura y expertos en la guerra. Pero no fue a ellos a quienes Dios eligió y les dio el camino de la ciencia; ellos perecieron por su falta de discernimiento, perecieron por su insensatez“. Y en el Libro de la Sabiduría (un libro Deuterocanónico de la Biblia) se dice: “Así también, al comienzo, cuando murieron los orgullosos gigantes, la esperanza del mundo se refugió en una balsa (Arca de Noé) que, conducida por tu mano (Yahvé), dejó al mundo la semilla de una nueva humanidad“.
El término además del Génesis, vuelve a utilizarse para designar a una raza de gigantes en Números: “Cuando Moisés envió a los espías a la tierra de Canaán, regresaron con la noticia de que allí habitaban gigantes….. También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes: y éramos nosotros, á nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos á ellos”. En el Deuteronomio se explica que: “Los emitas habitaron en ella antes, pueblo grande y numeroso, y alto como los hijos de Anac. Por gigantes eran ellos tenidos también, como los hijos de Anac; y los moabitas los llaman emitas. Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de nueve codos, y su anchura de cuatro codos, según el codo de un hombre“. En el Eclesiástico  dice : “¿Acaso, siendo joven (David), no mató a un gigante y extirpó el oprobio del pueblo, cuando lanzó una piedra con la honda y abatió la arrogancia de Goliat?”. De acuerdo a la tradición rabínica, los Anakim (anaquitas), Refaim (refaitas), GibborimZamzummim, y Emim(emitas), son de la misma raza Nefilim, y todos son nombres que se traducen por “gigantes”. Se habla de ellos como de una antigua tribu cananea, que vivía en las colinas de Judá y en la llanura filistea (Hebrón, Debir, Anab, Gaza, Gath, Ashdod). Habitantes originales de Canaán, ocupaban el Líbano y el área del Monte Hermón, se separaron al norte de la costa de Siria y Transjordania donde construyeron una cadena de ciudades fortificadas. Vivían en la región que más tarde ocuparon los moabitas y los amonitas, los primeros les llamaron emitas, y los segundos les llamaban zomzomeos.
En la época patriarcal, el rey Quedorlaomer y sus aliados los subyugaron cuando invadieron Transjordania. En la parte occidental de Palestina, se aliaron y entrecruzaron con los Caftorim, que habían venido desde Creta y se establecieron en las áreas costeras, siendo conocidos como filisteos y fenicios. En el relato bíblico en el que “Israel derrota a Og rey de Basán“, se señala que luego de la campaña por diferentes territorios, Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de 9 codos, y su anchura de 4 codos, según el codo de un hombre. El filisteo Goliat, habría sido refaíta y medía seis codos y un palmo de estatura (cerca dos metros y medio a tres metros), su hermano fue un gigante que se llamó Lahmi (“de pan” o bien “de Lahmu”). Algunos sugieren que habrían construido muchos de los monumentos megalíticos que se encuentran en Transjordania, especialmente los “dólmenes” en las cumbres de los montes. Estos eran tumbas formadas por grandes losas de piedra con forma de una habitación: cuatro losas formaban las paredes y una el techo. Como no se ha encontrado ni una sola tumba no profanada, y no se han recuperado utensilios ni trozos de cerámica de ellas, no se sabe quiénes las levantaron ni en qué tiempo fueron erigidas esas estructuras. El nombre (anak = gigante) se explica en el Midrash con una indicación de que llevaban cadenas al cuello.  Anac, era hijo de un Refaíta, probablemente hijo de Arba, y sus hijos fueron Sesai, Aiman, y Talmai, cabezas de los clanes arameos. Estos nombres parecen ser arameos, pero su significado no es claro. Los Anakim fueron vencidos por Caleb. Cuando Yahvé da la tierra de Moab, a los hijos de Lot, se dice que esa tierra había sido habitada por los emitas, “pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas”.
  
Es como si nos hubiéramos puesto una venda en los ojos para negar que en un pasado remoto existieron civilizaciones tal vez superiores a la actual. Entre las evidencias de ello  tenemos los hallazgos de momias de los indios guanche en las islas Canarias, que demuestran cómo en un pasado relativamente reciente esas islas estuvieron habitadas por una raza de hombres con una estatura promedio de 2,10 metros. Pero lo más sorprendente es que la capacidad craneana de estos indios guanches era de 2000 cm3, claramente  superior a los 1600 cm3 del hombre actual. En la costa nororiental de África se halló el esqueleto de una mujer tres veces más alta de lo normal y en Grecia y Hungría se hallaron otros esqueletos gigantescos. Las evidencias de estos  hallazgos  plantean hipótesis desconcertantes sobre el verdadero origen del hombre. No faltará quien diga que estos esqueletos están mezclados con huesos de elefantes.  Pero se sabe que han existido razas de gigantes en el pasado y lo mismo podrá suceder en el futuro. También puede darse el caso contrario, en donde una raza de gigantes pueda sufrir un proceso de mutaciones y adaptaciones que la lleven a reducir los tamaños. Con los antiguos dinosaurios de hecho pasó esto.  Jonathan Swift, en su obra “los viajes de Gulliver” nos intenta dar pistas al respecto. Uno de los secretos más antiguos, extraños y desconcertantes se remonta apenas al período conocido como la glaciación de Worms, hace unos 12 000 años. Recientemente un grupo de paleontólogos y arqueólogos peruanos anunció el descubrimiento de las ruinas incas de Caral, cerca de Lima y a sólo 18 kilómetros del mar. Estas ruinas sitúan al hombre americano en un periodo de hace  más de 4000 años, más o menos la misma época que la antigua civilización egipcia. Sin embargo se equivocan, ya que las ruinas de Tiahuanaco, construido hace al menos 12.000 años, son aún  más antiguas. Esto lo conecta a una civilización aún más antigua,  probablemente  las civilizaciones de la Atlántida o Mu.
oldcivilizations.wordpress

No hay comentarios:

Entradas populares