Actualmente 2012 es hablado, discutido y estudiado masivamente. Todos los que comenzamos éste camino de investigación nos encontramos con diferentes profecías y teorías científicas que coinciden de manera asombrosa y hace que sea imposible no inquietarse.
Los Mayas nos hablan del sexto sol, afirman que la Tierra se verá afectada por los cambios en el sol mediante un desplazamiento de su eje de rotación produciendo así grandes variaciones, la Tierra cambiará su polarización y creará una llamarada radiante. Esto producirá al mismo tiempo la subida de la temperatura del planeta y causará graves cambios climatológicos, geológicos y sociales. Esta subida de temperatura provocará seguidamente muchas consecuencias entre ellas el derretimiento de los polos.
Nostradamus también predijo la llagada del fin de la humanidad el día 21 de diciembre de 2012 en “El libro perdido de Nostradamus”, donde según investigaciones también podría haber predicho otras catástrofes como el Tsumani de 2004 en Indonesia. Otras profecías como la de los códigos secretos de la Biblia, la de los monjes budistas tibetanos o la del Profeta Benjamín Solari Parravicini han reforzado aún más esta teoría, pero sin duda el punto más importante es la predicción de la inversión del polo magnético de la Tierra y la confirmación por parte de
La NASA pronostica para finales del 2012 una fuerte tormenta solar que podría acabar con todos los sistemas de comunicacion y el 30 % de organismos vivos.
La más grande tormenta solar conocida hasta entonces sucedió en 1859, la cual supuso un colapso de las mayores redes mundiales de telégrafos.
Hoy en día suponiendo que la tormenta solo afectara a toda nuestra tecnología, todos nuestros dispositivos eléctricos dejarían de funcionar y se predice que los daños económicos serían superiores que los causados por el huracán Katrina.
La humanidad no está preparada para asumir ninguna noticia ni aviso de estas magnitudes tan catastróficas y se niega a creer en ello. ¿A caso es tan raro hacerse a la idea de una tormenta solar?, no resulta algo de tipo paranormal, sino de algo científico y constantemente estudiado y que para más inri ya ha sucedido antes. Cuando nos avisan en las noticias de una lluvia de estrellas o de un eclipse solar o lunar todo el mundo se prepara para observarlo con sus gafas o sus palomitas en la calle, pero si se trata de una grandísima y catastrófica tormenta solar nadie presta atención, nadie le da credibilidad.
El planeta está mostrando variaciones, están sucediendo enormes cambios de comportamientos en animales, temperatura y catástrofes naturales como huracanes, terremotos o tsunamis como el del día 11 de marzo en Japón, que ha supuesto el más grande desastre natural en la historia de Japón, equiparable al devastador efecto de la Segunda Guerra Mundial. Puede que todo ello sea un adelanto de lo que puede llegar a suceder en 2012, puesto que la Tierra y el Universo es algo aún totalmente desconocido.
Los Mayas nos hablan del sexto sol, afirman que la Tierra se verá afectada por los cambios en el sol mediante un desplazamiento de su eje de rotación produciendo así grandes variaciones, la Tierra cambiará su polarización y creará una llamarada radiante. Esto producirá al mismo tiempo la subida de la temperatura del planeta y causará graves cambios climatológicos, geológicos y sociales. Esta subida de temperatura provocará seguidamente muchas consecuencias entre ellas el derretimiento de los polos.
Nostradamus también predijo la llagada del fin de la humanidad el día 21 de diciembre de 2012 en “El libro perdido de Nostradamus”, donde según investigaciones también podría haber predicho otras catástrofes como el Tsumani de 2004 en Indonesia. Otras profecías como la de los códigos secretos de la Biblia, la de los monjes budistas tibetanos o la del Profeta Benjamín Solari Parravicini han reforzado aún más esta teoría, pero sin duda el punto más importante es la predicción de la inversión del polo magnético de la Tierra y la confirmación por parte de
La NASA pronostica para finales del 2012 una fuerte tormenta solar que podría acabar con todos los sistemas de comunicacion y el 30 % de organismos vivos.
La más grande tormenta solar conocida hasta entonces sucedió en 1859, la cual supuso un colapso de las mayores redes mundiales de telégrafos.
Hoy en día suponiendo que la tormenta solo afectara a toda nuestra tecnología, todos nuestros dispositivos eléctricos dejarían de funcionar y se predice que los daños económicos serían superiores que los causados por el huracán Katrina.
La humanidad no está preparada para asumir ninguna noticia ni aviso de estas magnitudes tan catastróficas y se niega a creer en ello. ¿A caso es tan raro hacerse a la idea de una tormenta solar?, no resulta algo de tipo paranormal, sino de algo científico y constantemente estudiado y que para más inri ya ha sucedido antes. Cuando nos avisan en las noticias de una lluvia de estrellas o de un eclipse solar o lunar todo el mundo se prepara para observarlo con sus gafas o sus palomitas en la calle, pero si se trata de una grandísima y catastrófica tormenta solar nadie presta atención, nadie le da credibilidad.
El planeta está mostrando variaciones, están sucediendo enormes cambios de comportamientos en animales, temperatura y catástrofes naturales como huracanes, terremotos o tsunamis como el del día 11 de marzo en Japón, que ha supuesto el más grande desastre natural en la historia de Japón, equiparable al devastador efecto de la Segunda Guerra Mundial. Puede que todo ello sea un adelanto de lo que puede llegar a suceder en 2012, puesto que la Tierra y el Universo es algo aún totalmente desconocido.
2012 será un gran cambio para la humanidad.
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