JARDÍN PLANETARIO...

El ser humano de hoy está muy lejos del Namlú’u, el humanoide original, o primordial, creado por los Kadištu para supervisar los animales del jardín planetario, que era Uraš (Tierra).

Como está citado con precisión en el Génesis (1.26), el humano fue el último espécimen en haber sido integrado en la reserva viva de los Diseñadores de Vida.

El objetivo de esta reserva era ensamblar el conocimiento genético de los emisarios de la Fuente. El ser humano original era altamente respetado, porque combinada dentro de sí el patrimonio genético de numerosas especies de Diseñadores de Vida…

Razas aliadas, dotaron a los Namlú’u con varias partes de su estructura corporal. Los diseñadores de Vida, tales como los Ameli trajeron el elemento principal de su maravilloso cuerpo semi-etérico. Todos los Diseñadores de Vida contribuyeron con un poco de ellos hacia la realización del Namlú’u.

Aunque los Namlú’u eran magníficos seres, estaba el asunto de la herencia colectiva de las ciencias combinadas de los Kadištu. Ellos eran, por esta razón, los guardianes vivientes del conocimiento de nuestro universo…

Una de las manipulaciones más notables del Gina’abul es haber enajenado al ser humano para producir un animal para que les sirviese a ellos. Para ello, el Gina’abul comenzó con el ser humano original que, entonces, mezclaron con sus propios genes y genes de monos.

La mezcla particular que los Gina’abul deben haber tenido para cocinar, para obtener a su A-DÁN resultó de una composición completamente imposible de realizar ahora por los científicos humanos. Requería el mismo tipo de manipulación que los Kadištu habían usado para ensamblar al humano original. Es Enki, el hijo de An y Nammu, quien fue encargado con este triste y sucio trabajo, bajo apremios que serán descritos en el segundo libro.

Yo llamo a esta combinación genética “sangre mixta” en el primer libro.

[¿Que tiene que decir el expediente genético? Obviamente este es un tema grandísimo, uno que nosotros (sus escritores SENT /Fin del Encantamiento) no han investigado adecuadamente. Sin embargo, en un reciente artículo, Humanos, chimpancés pudieran haber criado después de la fractura sugiere que los investigadores están actualmente confundidos, por decirlo suavemente. Un elemento fundamental del problema que puede causar enorme confusión es aquel de la sincronización de acontecimientos en el expediente.

Es porque toda investigación del ADN asume que el ADN lentamente va a la “deriva”, debido a mutaciones acumuladas, y esta suposición es inconsistente con el modelo una “intervención genética”, el cual tenemos aquí seguramente. Por ello, en este caso, ninguna de las conclusiones pueden ser correctas.]

El triste aspecto del A-DÁN-animal es atestiguado por muchas tradiciones – notablemente en los textos apócrifos, que son documentos a partir del mismo período de tiempo que las escrituras bíblicas, pero que no fueron admitidos por la iglesia. ¿Porqué no lo fueron?

Porque estos textos minan seriamente la versión oficial.

Libro Apócrifo de Adán, extractos de los Capítulos 13 y 15, ediciones Robert Laffont, 1980:

¿Quién me ha hundido en esta infinita tristeza de malvados ángeles de fétido olor y abominable forma? ¿Quién me ha lanzado en el medio de estos genios malvados? ¿Deberé crecer en un entorno que detesto, entre seres cuyos trabajos aborrezco? ¿Deberé tener su forma, y deberé vivir en su lugar de morada? ¿Porqué ha cambiado mi forma primitiva? Ah! Que me permitieran regresar al pacífico viaje, lo cual mi corazón anhela? Que me regresarían a las asambleas celestiales y las conferencias y las oraciones llenas de paz, que pudieran iluminarme con la luz desde lo alto y fura finalmente echado de esta envoltura de oprobio. ¿Cuánto más estaré atado a este cuerpo de arcilla?

Apócrifo Apocalipsis de Adán, textos gnósticos Nag-Hammadi, N-H Códice 5, ediciones Ganesha, 1989:

Puesto que (el) Dios me ha formado en la Tierra, y Eva al mismo tiempo, yo fui con ella hacia una gloria que ella había percibido en el eón del cual surgimos. Esta me enseñó, con una palabra, el conocimiento del Dios eterno. Luego llegamos a asemejarnos a los grandes ángeles eternos: nosotros éramos superiores, en efecto, al Dios que nos había formado, y a los poderes que son con el, pero eso no lo sabemos cómo. Entonces, dolorido con cólera, el dios, el amo de los eones y los poderes nos separó… Desde entonces, hemos sido instruidos, como hombres, de las cosas mortales. Luego, conocimos al Dios que nos hizo. Porque no somos independientes de sus poderes. Y le servimos en miedo y esclavitud. Y en consecuencia, nuestros corazones fueron oscurecidos…

Credo Mutwa... nombra a los reptiles que dirigen este mundo “los Chitauli”, significando “dictadores” en Zulú. … este término se puede traducir al sumerio… 

La humanidad posee un prodigioso destino.

¡La meta de la humanidad es no reproducir los errores de los reptiles, quienes querían disminuirlos genéticamente, quienes se presentaron como sus creadores!

por Gerry Zeitlin