¿Evidencia de vida extraterrestre o extradimensional?

El caso de Dorothy Izatt nos presenta evidencia importante sobre la existencia de vida extraterrestre. Desde 1974, Dorothy ha filmado objetos luminosos en el cielo nocturno de la ciudad de Vancouver con una cámara de cine de 8mm, más conocida como Super-8. Dorothy tiene más de 9,000 metros de película de estos objetos flotando en el cielo y creando estallidos de luz.

Varios expertos de Hollywood han revisado sus películas y han declarado que reproducir esas imágenes digitalmente requeriría un equipo de profesionales trabajando a tiempo completo y muchísimo dinero.

El doctor Allen Hynek,(1910-1986) reconocido astrónomo y ufólogo, luego de hacer una serie de pruebas para verificar la autenticidad del fenómeno decidió avalar las filmaciones de Dorothy Izatt. Tengamos en cuenta que el Dr. Hynek junto con el Dr. Jacques Vallee, fue quien propuso que los OVNIS podrían ser seres de otra dimensión y no extraterrestres, y que eso explicaría como desafían “aparentemente” las leyes de la física. En cuanto a las extrañas formaciones de luz en las imágenes de Dorothy, Hynek sugirió que podrían tratarse de ventanas al mundo en el que habitan estos seres que se abrirían por momentos, como consecuencia de los portales dimensionales que estos seres utilizarían para llegar a nuestro mundo.

Habría que dejar en claro que no existen muchas técnicas para producir el efecto de las estelas de luz de un fotograma de duración que aparecen en las filmaciones de Dorothy.

Una opción sería intervenir digitalmente la imagen, es decir, transferir las películas de Super-8 a una computadora para luego insertar los objetos luminosos y/o los estallidos digitalmente y finalmente regresar esas imágenes a Super-8.

Sin tomar en cuenta lo costoso que podría ser este proceso, el problema de esta opción es que a mediados de los años 70 e inicios de los 80, la tecnología de manipulación de imagen digital no estaba tan avanzada como ahora y el acceso a computadoras capaces de realizar semejante manipulación era muy restringido. En resumen, en esos tiempos muy pocos tenían una macbook con Photoshop CS5 o algo parecido en su casa.Otra opción sería intervenir la película. Podríamos cortar fisicamente la película en una moviola de cine, e insertar el fotograma que contiene los estallidos de luz. Luego produciríamos una nueva copia con el fotograma del estallido de luz ya incluido. Esta opción es viable, pero en otra secuencia del documental que no hemos incluido en los videos, el director de fotografía Craig Keif cuenta que alguien se dio el trabajo de retirar personalmente la película de la cámara de Dorothy y de enviarla a un laboratorio para evitar la intervención de terceros. La película regresó del laboratorio con los mismos estallidos de luz que Dorothy había filmado por años.No se puede descartar la posibilidad de que alguien trabaje en secreto con Dorothy Izatt insertando estos fotogramas en la película. Sin embargo, cuando uno pone en la balanza la falta de ganas de Dorothy de aparecer en los medios de comunicación, el testimonio y el aval del Dr. Hynek, y las extrañas luces registradas en video durante la filmación de este documental, es difícil no pensar que quizás eso pueda ser real.

Los Divulgadores esperamos que esos más de 9,000 metros de película que ha filmado Dorothy no se pierdan en algún sótano y sean investigados, quizás en esas imágenes estén algunas de las claves necesarias para empezar a considerar, seriamente, la existencia de vida extraterrestre.Los dejo con una reflexión hecha por el Dr. Allen Hynek en 1977 durante el primer Congreso Internacional sobre OVNIS en Chicago.

“Yo creo que el fenómeno de los OVNIS es real, pero no creo que sea una sola cosa. Debemos preguntarnos si la diversidad de OVNIS observados provienen de la misma fuente…hay evidencia suficiente para defender la existencia de inteligencia extraterrestre así como de inteligencia interdimensional. Me parece posible que exista una civilización que abarque lo físico, lo material y lo mental. Hay millones de estrellas que son millones de años más antiguas que el sol. Podría existir una civilización millones de años más avanzada que la nuestra. Hemos pasado del misil Kitty Hawk a la luna en casi 70 años, es posible que una civilización con un millón de años de antigüedad sepa algo que nosotros no sabemos. Los reinos de la mente, tan misteriosos para nosotros ahora, podrían ser parte común de una tecnología avanzada.”.

Alan Brain